31 mayo 2011

Mirando, comprendiendo

El arte siempre ha sido definido como toda actividad de la que se obtiene un producto con finalidad estética o comunicativa. El artista es aquel que produce obras de arte. 
Yo creo que la obra en sí misma no es el fin, sino el medio. Así como el artista es aquel que, sírviéndose de la brocha como único elemento de trabajo, consigue pintar infinitos sentimientos o ninguno. La meta del artista no es sólo ser visto, sino comprendido.  
Dicen que una imagen vale más que mil palabras. Por esto creo que el arte es el misterio de las mil palabras omitidas. Un vistazo; un segundo. A veces no hace falta más y otras, requiere toda la vida.
Pero, entre tú y yo, nadie dijo que comprender lo que hay bajo la superficie de cada uno fuera tarea sencilla. Hay tantas ausencias significativas y significados vacíos... La mayoría de las veces nosotros mismos podemos encontrarnos perdidos dentro de un sencillo marco pero es que cada persona es un mar de profundidades por descubrir.      
 

30 mayo 2011

¿Cuál es tu imposible?

       ¿No has tenido alguna vez la sensación de que la vida te coloca delante aquello que anhelas y que, en lo más profundo sabes, que nunca tendrás? Todos tenemos nuestros imposibles: aquella villa en la costa, el viaje de tu vida, el chico independiente que no se compromete... 

       Muchos vivimos creyendo que todo es posible, que tenemos en nuestras manos cuanto necesitamos para tener aquello que deseamos. No sin esfuerzo, no sin quererlo. Cerramos los ojos; borramos de la mente esa palabra tan molesta.. ¿cómo era? Imposible ... ¡sí, mejor! Damos un paso adelante; y luego, otro... y luego, muchos más -los que hagan falta. Y así, de esta manera casi inconsciente guiamos nuestra vida hasta que alcanzamos nuestros deseos. ¿Por qué no querer atrapar la luna? Nada está demasiado lejos; al final, no importa cuántas personas jueguen a tu lado: la vida es un juego en solitario donde las distancias las pones tú.
    

        ¿Qué ocurre con aquello que se nos resiste? Tener en cuenta que el verbo poder no se conjuga en negativo la 1ª persona de indicativo: yo no puedo. Lo mejor es empezar con el intento -que puede convertirse en logro. Porque aquel que nunca arriesga, no genera la oportunidad de conseguirlo -así como el que nunca juega, no podrá ganar. Pero sobre todo, es importante no rendirse, no dejar de intentarlo porque el día que dices "no puedo" te cierras puertas, te alejas... No dejes que esto te ocurra. 

       Creo (porque quiero creer) que cuanto se presenta ante ti en la vida, está a tu alcance. Con mayor o menor dificultad, si es lo que deseas: es tuyo. Además, entre tú y yo, las metas más difíciles son las que más valen la pena, con las que de verdad se saborea la victoria ...¿no merecen acaso el intento? 

     Por eso hoy deténte; piensa un suspiro; busca entre las estanterías de tus profundidades aquello que quieres y hazlo tuyo.

¡Feliz Lunes!

28 mayo 2011

Si algún día se me olvida tu nombre

       ... no me lo tengas en cuenta, por favor, ...¿Pablo?

       Hace tiempo que no nos vemos, sí; pero eso no ha condicionado que ahora no te recuerde. Y tenías un nombre tan sencillo. Una sola palabra, unas pocas sílabas que adornaban ese rostro tuyo que mis ojos reconocen al instante. ¿Acaso no te llamé mil veces? No creo que haya sido capaz de olvidar tu nombre, ...¿Carlos?

        Supongo que será cosa de la edad; no, no quiero creer eso, ...¿Ángel?

       Concentración, asociación de ideas, caras, nombres... ¡Nombres! ¿Por qué será que nuestra privilegiada mente puede recordar los más pequeños detalles, aquellos más insignificantes y no retener los más importantes? No por gusto, desde luego. Porque si de gustos se tratara, al menos yo, elegiría recordarlo todo.

       Mi padre dice: "de esta vida sólo nos llevamos puesto cuanto aprendemos y vivimos; todo lo demás, sobra". ¡Cuanta razón tiene! Y es por esto que, si tuviera que elegir... elegiría de nuevo mil veces el camino que me ha traído hasta aquí. Siempre he ido ligera de equipaje, caminando a pie por el sendero de la vida y con las manos en los bolsillos repletos de experiencias. Unas buenas; otras no tan placenteras. Y a pesar de que siempre defiendo que hay que olvidarse de lo malo y centrarse en lo bueno, no podemos por ello vivir ignorantes de que ambas situaciones -las equivocaciones y aciertos- contribuyen de igual manera en tallar lo que somos tú y yo.

        Y aun intentándolo con todas nuestras fuerzas, se nos olvidan. Las propias vivencias se nos escapan por el resquicio de las puertas de nuestra mente; a cada instante. Muchas, sin que las podamos recuperar jamás... Pero no pensemos que 1 segundo de nuestra vida olvidado, es 1 segundo no vivido. No. Estuviste allí: respiraste, sentiste, exististe. Y la prueba es que de no haber sido así, tu presente ahora sería completamente diferente.

         Si no te hubiese conocido, no reconocería tu rostro; pero lo hago. Por eso, perdona si algún día se me olvida tu nombre ...¿Marcos?  

27 mayo 2011

La verdad es que hoy...

... me apetece tomarme un mojito. 
¿Qué? No todo va a ser filosofía :)
¡Venga! Un chin-chín entre tú y yo.














¡Feliz tarde y buen comienzo de fin de semana!

26 mayo 2011

¿Qué significa "qué significa"?

       Esta era la gran pregunta en mi infancia...

       Y ¿por qué hablar ahora sobre ella? Porque se trata quizá del capítulo de la vida en que uno empieza a convertirse en la persona que es. Sí, luego pasamos por la adolescencia y se va todo al traste; pero yo creo que la esencia permanece -estoy por jurar- toda la vida. Así que... ¿qué mejor manera de conocer a alguien que echando un vistazo a lo que hay detrás de ella? Pero sólo mirar de reojo, ¿eh? 

       Yo era muy curiosa, la curiosidad ocupaba mis días... ¿por qué esto? ¿por qué aquello? Ponía en duda todo lo que me contaban y, al contrario, tenía total confianza en que, lo que yo decía a los demás era plenamente verdadero (aunque la mayoría de las veces estuviera equivocada). Es por esto que la frase del encabezado resume mis remembranzas de antaño: era la pregunta del millón, la que todos me oyeron decir en alguna ocasión y que nadie me supo responder. Si me daban a elegir entre los libros y el deporte: los libros; entre la comida y una buena charla: ¡clarísimo! Me encantaban las manualidades y soñar que conducía mi propio coche.

 
       Era tan fácil ser una misma... 

       A veces me gustaría volver a esos días felices y sencillos, volver a saborear aquellos momentos en los que mi mayor problema era pintar un mural sin mancharme el uniforme y que así mi madre no se enfadara. Sin necesidad de tomar decisiones, ligera de responsabilidades y con esa perpetua sonrisa estampada en el marco de mi ser. Entre tú y yo, creo que la vida nos exige que nos hagamos mayores demasiado pronto; sin saber siquiera si estamos preparados, si seremos capaces, con tanto por aprender... Nos obliga a salir al mundo, probar nuestras alas y, en definitiva, ser capaz de pintar nuestro propio dibujo sin hacer un boceto.

A por la brocha, 
¡Feliz tarde!
 

25 mayo 2011

Aislamiento de contacto

       Digamos que esto fue lo que llevé a cabo durante los últimos tiempos. Atropellada por las redes sociales, decidí probar con un tiempo de aislamiento de contacto dejando mi puerta cerrada y con restricción de visitas. Hasta me olvidé de cuáles eran las llaves... Colgué el cartel de "no te molestes en llamar, no voy a contestar", di media vuelta y me fui a buscar algo que hacer con mi vida. 

       Lo que yo no sabía era la gran nada que me esperaba a la vuelta de la esquina. Hacer "borrón y cuenta nueva" en la vida no es tarea fácil. Romper con lugares, con situaciones o con amistades es siempre algo que te deja mal sabor de boca; pero lo afrontas, porque la vida sólo tiene un sentido y es hacia delante. Lo mejor que podemos hacer es liberarnos de las cargas negativas que nos atan, ¡hacer espacio para lo nuevo! al igual que ocurre con la brisa que se cuela tímidamente por la ventana en primavera: entra como quien no quiere la cosa, suave y agradable. 

       Por aquel entonces no sabía mucho de mí, la verdad, así que empecé probando aquellas actividades que podrían gustarme. Quise viajar; y viajé. Practiqué in vivo el idioma que más amo en el mundo (el inglés). Aprendí algo de cocina. Terminé de leer los libros que había dejado a medias. Me apliqué en dibujo y algo de decoración. Me compré una orquídea (y sigue viva). Al principio comencé yo sola; y poco a poco, fui encontrando por el camino gente amiga con la que hoy comparto mis gustos.      

       Ahora juego a jardinera los fines de semana y practico alemán siempre que puedo. Pero, ¿entonces por qué Deb ha vuelto a caer en las redes de internet?...


       Porque, entre tú y yo, supongo que una vida sin amor no es vida. Y como ocurre con casi todas las cosas que valen la pena, no vienen porque las busques... sino porque ellas te encuentran a ti. Mirando en el archivo de mi anterior blog di con una frase que yo misma había escrito allí "porque el amor no nace en la distancia" y que me hizo decir: "¡mecachis!" ... Qué poco me gusta estar en desacuerdo conmigo misma. Pero otro día te cuento, que ahora se me enfría el café.  

¡Feliz tarde!

24 mayo 2011

Lo que hubo antes

Todo comenzó con una idea... 
... la idea de "ey, yo también podría hacerlo".

Mis inicios en loquepasaentenerife
Aquí fue donde hice mis primeros pinitos literarios. Mi buena amiga I. conocía a alguien que escribía allí y me la presentó. Esa persona me habló acerca de la página y la grata experiencia que ella tenía. Oh, al primer minuto ya estaba convencida de que debía probarlo por mí misma.  Pero si bien mi profesor de Lengua y Literatura en el colegio siempre me dijo que "escribía bien", eso no sería razón de peso suficiente para que yo lo practicase. No, las musas no se presentan en tu casa de improviso un viernes por la noche y te chivan al oído la respuesta. "Escribir bien" implica que el que lo haga, disfrute con ello; esto lo comprendí cuando tuve mi primer blog frente a mí, en mi pantalla. Aún sigue aquí, impertérrito, para el recuerdo.  

Mundanza a elPais.com
Para ser honesta, no pasé demasiado tiempo en esas esferas porque enseguida captó mi atención otra página similar, pero con mayor afluencia y más facilidad de manejo: elPais.com. Fue una buena época respecto a mi creación literaria y aún conservo lo que escribí aunque lamentablemente, por fallos técnicos (¡¡mal***** ordenadores que se cuelgan!!) no pude -y de hecho, sigo sin poder; volver a acceder a él. Menos mal que se me ocurrió guardar un borrador de las entradas, ¡uf!... Además, para colmo de catástrofes, por la misma época mi lengua me metió en algún que otro problema así que decidí, por tanto, cerrar el pico.

       Luego vino... ¡ah! Sí. Tercero de Medicina. Y claro, ¿quién tenía tiempo para sentarse a escribir? ¡Escribir! No, no, no... Primero estudiar, ya habría tiempo para la diversión en verano (en Boloniés: verano = 1 mes). Cuando llegó la época estival del disfrute, en efecto, la disfruté. Muchísimo es una pobre descripción. Las experiencias vividas durante ese mes, se quedaron grabadas a fuego en mi mente y mi corazón; no es que hayan influido positivamente en mí, es que se han integrado en mi carácter.
 

       Sí; no sólo aprecio el buen café (cargado y con generosa leche condensada, ¡gracias!) sino que también me pierdo por un helado de fresa y chocolate; sobre todo si está hecho en inglés.
       Respecto a lo que está por venir, eso nadie lo sabe... ni siquiera yo. Esta nueva edición del blog, que ya es Entre tú y yo 3.0, pinta muy bien, ¡habrá que ver! :) Nunca le cambié el nombre, curioso... Me planteé nuevos comienzos, proyectos diferentes, pero con ninguno me sentía tan cómoda como ahora, ahora que pienso que esto que te escribo va a quedar como siempre entre tú y yo.

Me presento

Normalmente se escribe cuando se tiene algo que decir: relatamos, opinamos, enseñamos a los demás quiénes somos nosotros, qué hacemos... Tenemos una idea y al momento, las palabras fluyen solas; vemos cómo se colocan, revoloteando apresuradamente en la pantalla mientras hilvanamos nuestra historia párrafo a párrafo. Con más o menos entusiasmo, con mayor o menor sentido literario. Y así, sin saber del todo cómo, ocurre: en un clic conectamos con el mundo.

Andaba vagabunda -con mis pensamientos, hablando en voz baja y dejando que las palabras se me escaparan de entre las manos. Hasta que di con una buena lazada. Ningún motivo concreto me ha traído hasta aquí y, a la vez, tengo todas las razones para creer que esto puede ser una idea brillante. 

Me alegro de haber creado este sitio y que sea el pretexto de poder juntar en un mismo párrafo un par de tazas de café, ideas a miles y, de nuevo, algo de alboroto entre tú y yo.